La Educación Formal y No Formal en España.
Las misiones pedagógicas en la II República. Parte II y final
¿Qué es la Institución Libre de Enseñanza?
Institución de carácter privado, creada a finales del siglo XIX (1876) por el profesor universitario Francisco Giner de los Ríos, junto a otros profesores, con la intención de modernizar a España, reformando y mejorando la educación en todos sus niveles.
Se trataba de un centro educativo basado en modelos pedagógicos modernos, laicos y progresistas, que se proponían como alternativa a la enseñanza oficial dominada por la iglesia.
Esta institución se aplica a los principios de la “Escuela Nueva” (socialización, individualización, globalización, etc.)
Las líneas pedagógicas que definen la Institución: formación de hombres útiles a la sociedad, reconocimiento de la mujer en igualdad con el hombre, una Escuela activa, basada en el método científico, que abarca toda la vida del hombre y que pretende la formación de hombres completos, abiertos a todos los ámbitos del saber humano.
¿Quién es Francisco Giner de los Ríos?

Ronda, 1839-Madrid, 1915. Pedagogo, pensador y escritor español.
Estudió Derecho y Filosofía en las universidades de Barcelona, Granada y Madrid. De ideas progresistas, defendió la libertad de cátedra y de investigación, teniendo muchos problemas por esta causa. Consecuencia de esta falta de libertades abandono la universidad y fundó la ILE.
Giner opuso la libertad a la autoridad. Fundador en 1876 de la Institución Libre de Enseñanza (ILE) cuando era profesor universitario, a la que dedicó el resto de su vida.
Se trataba de un centro educativo basado en modelos pedagógicos modernos, laicos y progresistas, que se proponían como alternativa a la enseñanza oficial dominada por la Iglesia.
Trató de lograr a través de esta Institución la formación de hombres útiles y completos para la sociedad, libres e independientes de pensamiento, abiertos a todos los ámbitos del saber humano, en definitiva buenos maestros formadores y educadores.
Giner dejó una amplísima obra escrita sobre temas jurídicos, filosóficos, políticos, artísticos y literarios.
¿Quién es Manuel Bartolomé Cossío?

Haro, La Rioja, 1857- Madrid, 1935.
Pedagogo e intelectual muy respetado de su época. Discípulo avanzado de Francisco Giner de los Ríos, fue profesor de la ILE y su director a la muerte de Giner de los Ríos, así como Director del Museo Pedagógico para la Instrucción Primaria.
Intenta crear las Misiones Pedagógicas ya en tiempos de la monarquía de Alfonso XIII, pero no lo logra hasta la llegada de la II República en 1931.
Cossío será el Presidente de las Misiones Pedagógicas siendo su principal teórico, llegando a formar un Patronato General, compuesto de intelectuales y pedagogos de prestigio, que inspecciona las escuelas de párvulos. Se forma también un curso teórico-práctico específico para la futura formación de maestras de párvulos.
Por un Real Decreto sólo las mujeres podían estar en la dirección de las escuelas de párvulos.
Dedicó gran esfuerzo a buscar jóvenes voluntarios, cultos y entusiastas dispuestos a viajar a recónditas aldeas para dar a conocer la cultura española y la nueva política republicana. Acudió a antiguos alumnos de la ILE al ser Cossío profesor de la misma. Enseñó a los educadores una educación activa, enseñándoles los principios de la “Escuela Nueva”.
Fue una gran autoridad en pedagogía hasta el punto de que todavía hoy su obra sigue constituyendo una auténtica referencia en esta materia.
¿Cuándo se fundan las Misiones Pedagógicas?, ¿Cuánto duran?, ¿Cuál es su función?
Hay un primer intento en época anterior a la República, durante el reinado del rey Alfonso XIII. Manuel Bartolomé Cossío trata de que el estado realice Misiones Pedagógicas para apoyar a los maestros rurales, pero no lo consigue.
La culminación del espíritu de la ILE será la creación de las Misiones Pedagógicas (MP), ya en la II República (1931), llegando a ser su presidente Bartolomé Cossío.
El período de funcionamiento podría delimitarse desde la llegada de la II República en 1931 hasta que se produjo el cambio de gobierno, llamado bienio negro, en el que sube al poder la CEDA (gobierno de derechas, de ideas conservadoras) en el año 1933.
Será en 1934 cuando tiene lugar la última de las Misiones Pedagógicas de carácter social que fue la de Sanabria en la provincia de Zamora que duró dos semanas, debido a la drástica reducción del presupuesto a las Misiones Pedagógicas por parte del gobierno vigente.

Se crean las Misiones Pedagógicas para que el campo, a través de la cultura, el ocio, la música, los libros, el cine y el teatro, sea partícipe de la cultura difusa de que disfruta la ciudad. Entendiendo por cultura difusa o Educación Indirecta, según el pedagogo Manuel Bartolomé Cossío, la visión del mundo más amplia a través de la radio, periódicos, anuncios, cine o escaparates que tienen los ciudadanos de las ciudades.
Frente a unas clases memorísticas basadas en el orden, la quietud, el acartonamiento y el miedo, irrumpe una metodología activa, participativa, democrática, que tenía el entorno como un instrumento fundamental en la enseñanza.
Otra de sus funciones fue crear el entusiasmo y la ambición de aprender. Las Misiones Pedagógicas crearon estímulos: “No se tenía base, pero sí intuición”, comentaba algún misionero de las Misiones Pedagógicas.
Cossío decía que las Misiones Pedagógicas iban a entretener, a divertir a los campesinos, enseñándoles el progreso y la cultura, siendo también de importante apoyo a la labor del maestro rural.
El país era principalmente rural, y había que llevar la cultura a las aldeas, había que alfabetizar a ese mundo rural tan atrasado para lograr ese estado de modernidad que disfrutaban en otros países de Europa.
¿Quiénes forman parte de ellas?

Cossío se acordó primero para colaborar con las Misiones Pedagógicas de los ex-alumnos de la Institución Libre de Enseñanza al ser él profesor de la misma y discípulo directo de Giner de los Ríos.
Más adelante Cossío, como presidente de las Misiones Pedagógicas, y el resto de participantes en las Misiones Pedagógicas forman un Patronato compuesto por intelectuales de prestigio como los pedagogos Luis Bello o Angel Llorca, o los poetas Antonio Machado o Pedro Salinas.
El secretario del Patronato será Luis Santillano, discípulo de Cossío y con amplia experiencia en las bibliotecas ambulantes y la educación rural será el principal teórico y artífice de las Misiones.
Otros personajes importantes de las Misiones Pedagógicas fueron Luis Cernuda, María Zambrano, Antonio Sanchez Barbudo, Rafael Dieste, Pedro Pérez Clotet y así hasta configurar una lista de más de 500 personas entre maestros, inspectores de educación, profesores e intelectuales.
¿Qué actividades realizan?

Cuando las Misiones Pedagógicas llegaban a un pueblo se contactaba con el alcalde o el maestro, se pregonaban las actividades que se iban a desarrollar horas después para que todo el pueblo estuviese enterado y cuando iba a comenzar la función, Cossío daba un discurso divulgativo a modo de conferencia sobre los derechos y deberes de los ciudadanos.
Se hablaba sobre aspectos sociales en general, lo que normalmente entusiasmaba a la gente, poco acostumbrada a que algo diferente alterase su vida cotidiana.
Las actividades que las Misiones Pedagógicas desarrollaban en cada pueblo solían ser:
- Una “Biblioteca Popular”. La selección de libros para las mismas corría a cargo de Matilde Moliner con la ayuda de Antonio Machado.
- Un «Teatro del Pueblo”, dirigido por Alejandro Casona.
- Un “Coro del Pueblo” dirigido por Eduardo Martínez Torner, donde principalmente se enseñaba y ensayaban canciones populares regionales.
- Un “Museo Itinerante de Pintura”, donde se les enseñaba copias de cuadros del Museo del Prado, enseñándoles las características principales de cada uno. Lo dirigía Ramón Gaya.
- La documentación gráfica corría a cargo del cineasta José Val Del Omar. Se proyectaban películas de cine mudo, principalmente de Charlot, explicando a la gente el argumento de la película, ya que, dado el analfabetismo del mundo rural, a la gente les costaría entender lo que estaban viendo.
Se solía proyectar al aire libre, aprovechando la pared de alguna de las casas, o poniendo sábanas como pantalla.
Conclusiones
Las Misiones Pedagógicas son un importante esfuerzo que se hizo en España por crear un espíritu de cultura y libertades que logró llegar a los lugares más recónditos del país.
Más de 500 personas del mundo de las artes, las letras y en definitiva de la cultura, a nivel privado, participaron con gran entusiasmo de esta iniciativa de llevar el saber a lugares apartados.
Multitud de jóvenes “misioneros” voluntarios y cultos, muy entusiastas con la idea, estuvieron dispuestos a viajar en condiciones difíciles a los lugares más insospechados de nuestra geografía, para dar a conocer la cultura española y la nueva política republicana.
Las Misiones Pedagógicas fueron tan importantes para el pueblo, que no sólo contribuyó a disminuir el índice de analfabetismo, sino que fomentó una educación civilizada, no religiosa, acercando al pueblo al tesoro de la sabiduría nacional, que no tenía que ser necesariamente religiosa, sino basada en unos métodos mucho más abiertos y democráticos.
Si algo lograron las Misiones Pedagógicas es que los pueblos y sus gentes se entusiasmaran cuando se acercaba una de sus camionetas, de forma que un ambiente de fiesta y participación inundara el pueblo los días que permanecieron en él, además del interés por las actividades que desarrollaron: cine, teatro, música y lectura a través de sus bibliotecas ambulantes, teniendo el «libro» como una herramienta de crecimiento personal.
Determinadas críticas tanto de diputados de derechas como de ciertos sectores de la izquierda, terminaron por no aceptar las misiones, ya que unos (las izquierdas) consideraban que en el fondo no tenían ninguna actividad útil, los campesinos seguían siendo pobres y no contribuía tampoco a agilizar la reforma agraria. Y otros (las derechas), en el fondo temían una transformación social, porque las Misiones Pedagógicas producían una conciencia cívica en los campesinos, y esta conciencia cívica les abría a un mundo de valores más democrático.
Finalmente el gobierno derechista consigue recortar las cantidades destinadas a apoyar estas Misiones Pedagógicas en el presupuesto de 1935. Las Misiones Pedagógicas se logran mantener un poco más de tiempo por el entusiasmo personal de los inspectores y universidades de provincias que siguieron apoyando la iniciativa, cada vez con menos medios, hasta que llegaron a desaparecer definitivamente.
Con ello se acaba en el país la esperanza de muchas personas que creían incorporarse a un mundo nuevo, democrático y progresista que parecía posible de alcanzar con la llegada de la República.
Resulta especialmente interesante la visualización del video de las Misiones Pedagógicas que se encuentra en Youtube, ya que es un medio divulgativo, enriquecedor e interesante que nos remonta a una época desconocida para buena parte de la población, y gracias a las imágenes en blanco y negro y a las opiniones personales de los misioneros y maestros que aparecen hablando y comentando sobre su experiencia vivida en las Misiones, nos permite relacionar conceptos y personajes, además de conocer una etapa histórica fundamental en nuestro país como es el de la evolución de la Enseñanza.
Fin de la segunda parte y final.
Madrid, 14 de Marzo de 2015
por Luis Martínez
Este es el enlace donde puedes disfrutar del documental «Las misiones pedagógicas»